Paso a contar que mi tobillo pasó de morado a verde, aparentemente eso es bueno. All Fours me tiene cautivada y hace mi reposo junto a Ramona Stone un verdadero paraíso.
Sin embargo, quiero confesar que algo del nuevo mandato de la vacación (no tengo que hacer nada) puede estar saliéndose de control.
Todo empezó hace muchos muchos años. De hecho antes (hace 15 años digamos) nos encontrábamos en la casa de nuestro amigo Eric, cuando vivía en González Lahmann, a jugar Scrabble, mi juego de mesa favorito.
Pero pronto encontramos un app con una versión del juego al cual llamaron “Apalabrados”. Varios sucumbimos a bajar el app, las partidas son solo para dos personas a la vez y cada quien tiene hasta 7 días para hacer su movida. Así que al principio teníamos esos juegos en tiempo virtual y relajado, dos o tres partidas con les amigues entusiastas.
Aquí voy a hacer la anotación de que Luis nunca quiso bajar el app, porque se conoce y temía no parar de jugar nunca. Maca, otra amiga amante de las palabras, al final borró el app porque la distraía mucho.
Hace un par de años solo juego con Mau Blandino y Paula Echeverría. Siempre tenemos una partida abierta, cada quien juega cuando puede. Mau siempre me gana o mejor dicho, yo siempre pierdo pero sigo jugando porque lo importante es jugar.
Pero “Apalabrados”, consciente del tipo de usuarios que tiene, nerds cobijados de cool porque juegan a quién sabe mejores palabras en un app, se inventó unas “ligas”. Cada 7 días una está jugando y acumula puntos en una copa dorada y estos puntos te permiten subir de liga, seguir en la misma o bajar.
Por semanas de semanas pude ignorar el tema. Para mí se trataba de un par de partidas que sobre todo mantienen vínculos de amistad.
Pero sobre el ícono de mi usuario apareció una garrita gris que tampoco me generó nada hasta hace unos días que vi que en el ícono de Mau aparecieron dos garritas doradas.
¿Qué significan las putas garritas?, pensé y llegué al lugar del app donde voy viendo que las garritas indican en qué nivel de la liga estás. Mi garrita gris significaba “aprendiz I”, las dos doradas de Mau, “avanzado II”.
Me esforcé un poquito, es decir, hacer mi jugada más rápido para acumular puntos, salí de la liga de “aprendiz I” y pasé a “aprendiz II”. Hoy, con orgullo, estoy en “aprendiz III” luchando por subir a “avanzado I”.
El problemita es que para trepar por estas ligas, jugar de forma tranqui y relajada solo con Mau y Paula no basta, no se recolectan suficientes puntos, si sigo jugando así no voy a pasar de “aprendiz I” nunca. Entonces empecé a jugar con desconocidos y desconocidas que al igual que yo están desesperados y desesperadas por acumular puntos y avanzar por las ligas del saber formando palabras con letras aleatorias.
Amigues, hoy tengo 12 partidas activas y hasta a la taza del baño voy con el cel porque necesito alcanzar a Mau en “avanzados II”, es ya una cuestión de honor.
Valió picha la vacación.